¿Sabes qué tipo de ciclista eres? Haz el test y descúbrelo.
En el mundo del ciclismo tiene que haber de todo, ¿no? ¿Eres trotamundos, o tal vez un fofisano? ¡Desvela el misterio y completa el test!
Si pudieras tener cualquier bicicleta y llevarla a donde quieras. ¿A dónde sería?
Imagina el mejor día de tu vida. ¿Cuál sería tu objetivo o tu destino ideal?
¡Escoge tu tipo de bicicleta favorita!
¿Qué sueles ponerte para montar en bici?
¿A qué tipo de recorrido te adaptas mejor? ¿Cuál disfrutarías más?
El chófer
¡Vamos todos al autobús! El ciclismo tranquilo y una buena dosis de conciencia son los ingredientes clave para disfrutar de un día rodando. Eres una persona cauta y protectora, líder natural de la manada: contigo, llegar al destino fijado se convierte en algo seguro y fácil.
El metropolitano
Bajo la lluvia o cuando hace sol, no pierdes tu ocasión. Tu bicicleta te abre a la libertad y a la sensación de que todo está bajo control. Vas a tu antojo y sabes rodar con confianza. ¡Ah, ojalá la vida fuera tan sencilla como montar en bici!
El fofisano
De acuerdo: como atleta, aún te falta mucho entrenamiento. Sí, puede que escuches algunas risitas al pasar junto a esos semidioses esculpidos a golpe de cincel, pero te enorgulleces de salir a rodar los domingos porque ¡por algo se empieza! Persevera hasta llegar a tu meta sea cual sea, porque pronto, esos músculos bien tonificados serán motivo de orgullo.
El debutante
Quien nada arriesga, nada gana. Quien no rueda, no sufre esguinces. Sí, es duro no tener ni idea y aprender a base de coscorrones. Pero, por si te interesa, hasta los más avanzados tuvieron que dar un primer paso y a lo mejor hasta parecían más raros que tú. Así que ¡adelante, que empiece la aventura!
El experto en moda
El lujo no tiene por qué ser incómodo, ¿por qué no atreverse un poco y ver qué tiene para ofrecer? Sabes que verse bien significa sentirse bien (que al final, es lo importante) Entonces, ¡sientéte bien con estilo, que sin duda te haces notar!
El trotamundos
Te llaman Willy Fogg... sobre ruedas. A lo mejor no has dado la vuelta al mundo en 80 días, pero has visto mucho y, sin duda, tienes ganas de ver más. Porque no hay nada como encontrar un nuevo destino e incluirlo en tu ruta, con montañas y todo.
El innovador
¿Alguien ha dicho sistema de cambios inalámbricos? Eres como ese niño que va el primero a la tienda al enterarse de que venden una nueva chocolatina de sabores alucinantes. Cualquier cosa que busques en el mundo del ciclismo, acabarás encontrándola. Sí, la bicicleta es un vehículo casi perfecto, ¡pero eso no te impide hacer algún arreglito de vez en cuando!
El montañero
Los mitos estaban equivocados. Cuando los doce dioses griegos se reunieron en el Monte Olimpo, solo faltabas tú. Afrontas la montaña de frente y con pedaladas de acero, como si hubieras nacido para ello. La gente te admira porque, francamente, ya disfrutas de las vistas desde tu última cima conquistada.
El contrarrelojista
El tiempo es esencial y la tenacidad es clave. Si hay que combinar velocidad y diligencia, eres capaz de ganarle hasta al Correcaminos. No olvides compensar el estar batiendo marcas personales con rodar despacio y detenerte un rato a disfrutar del paisaje.
El veterano
¿Echas de menos los viejos tiempos, verdad? Ah, seguro que tienes innumerables batallitas para contar. El ciclismo tiene tanto de liberación como de viaje para compartir tus historias y tu experiencia. El conocimiento es infinito y puede resultar muy satisfactorio enseñar a rodar a quien siente tu misma pasión. Sabes que lo mejor que puede hacerse con los buenos consejos es compartirlos y ver así cómo mejoran las pedaladas de quienes te rodean.