Una razón lógica podría ser. Es que Pedersen sumó más segundos, terceros y cuartos puestos que Richard Carapaz y por eso tiene más puntos. Es cierto, el danés acabó en segunda posición en las dos etapas de Países Bajos que finalizaron al sprint, en la cuarta etapa en Laguardia por detrás de Primoz Roglic y en la última en las calles de Madrid. Mientras que el ecuatoriano solo sumó en las tres etapas que venció, en el resto estuvo lejos de los primeros puestos.
Pero eso lo justificaría que la victoria fuese para el ex-campeón del Mundo, no para que cuadruplicase en puntos a un corredor que ha ganado las mismas etapas que él.
La razón es otra y tiene que ver con el reparto de puntos en meta dependiendo del nivel de cada etapa y con los puntos que se dan en el sprint especial que hay en los últimos kilómetros de cada jornada. Mads Pedersen sumó victorias y segundos puestos en las jornadas catalogadas como llanas por la organización y que dan al vencedor 50 puntos en meta, 30 al segundo, 20 al tercero y así sucesivamente. Mientras que Richard Carapaz obtuvo sus triunfos en tres etapas de alta montaña, en las que el ganador solo se lleva 20 puntos, es decir, los mismos que el tercero de una etapa llana. Por tanto el ecuatoriano nunca fue un rival real del danés en la pelea por el verde.
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LOS VERDADEROS RIVALES DE PEDERSEN
Al inicio de La Vuelta, allá por mediados de agosto en Países Bajos, uno de los máximos candidatos a vestirse de verde en Madrid era Sam Bennett, el velocista irlandés del Bora. No en vano las dos primeras etapas en línea y por tanto los dos primeros maillots ŠKODA fueron para él. Aguantó como líder hasta la etapa séptima, cuando Pedersen aprovechó una escapada para llevarse el sprint especial de Grado, antes del final en alto de Collau Fancuaya.
La jornada de descanso en Alicante y el positivo por Covid del irlandés quitaron a Pedersen a su rival más potente. Después de la etapa la ventaja del danés sobre el segundo clasificado era de 60 puntos, pero este puesto lo ocupaba Remco Evenepoel, que solo estaba pensando en ganar La Vuelta.
Pese a la solida ventaja con la que contaba, Pedersen siguió trabajando, metiéndose en escapadas para llevarse los puntos de los sprints especiales o arrancando cuando ya había pasado la escapada y todavía quedaban puntos por sumar.
Del resto de los velocistas solo Groves sumó una etapa, la undécima en Cabo de Gata, y Molano otra, la última en Madrid. El resto de las llegadas al sprint fueron para Pedersen.
Entonces ¿quién fue el segundo clasificado, que todavía no ha salido en la crónica? Pues Fred Wright, del Bahrein. Es un hombre rápido que fue acumulando puntos en las llegadas masivas y que también fue capaz de infiltrarse en las escapadas y sumar en sprints especiales. Eso sí, se quedó a más de doscientos puntos de Pedersen. Contra él chocó Primoz Roglic el día que el esloveno se marchó a casa.
Y el tercer clasificado tiene una historia curiosa. Enric Mas no ganó ninguna etapa y en todas las que sumó en meta fue del segundo puesto para abajo y en jornadas de alta y media montaña. La última de ellas en Navacerrada le dejaban el quinto de la clasificación del maillot verde, pero en la jornada final en Madrid puso al Movistar a trabajar para hacer primero en el sprint especial de la Castellana. Esos 20 puntos le auparon a la tercera plaza…. que otorga 20 puntos extra en la clasificación UCI por equipos y en la que el Movistar está peleando por no descender del World Tour.