Un Tour de Francia 2020 que se parece cada vez más a La Vuelta

Escrito por Luis Ortega @ciclored

Muchas montaña y desde el inicio, hasta 9 etapas y poca crono, solo una y con final en alto, en La Planche delles Belles Filles. El Tour de Francia 2020 es el más innovador de los últimos años y toma las ideas de La Vuelta a España con el objetivo de hacer una carrera más abierta y emocionante.

Si algo le ha quedado claro a los Froome, Thomas, Roglic, Dumoulin y compañía durante la presentación del Tour 2020 (27 de junio a 19 de julio) es que deben olvidarse de entrenar la contrarreloj, centrarse en la montaña y llegar finos a la primera semana de carrera. El Tour ha cogido los mimbres de La Vuelta y parece más diseñado para ciclistas como Bernal, Pinot, Bardet, Alaphilippe o Landa, que no tendrán que pagar un excesivo peaje en la contrarreloj y se podrán labrar la victoria en la alta montaña.

En este 2020 se tocan todas las cadenas montañosas de Francia. Ya solo en la primera semana empiezan por los Alpes Marítimos en la segunda etapa, con Turini, Colmiane y Col de Eze (ojo, más de 3.500 metros de desnivel el segundo día). La zona de Pre Alpes del sur con el final en Orcieres Merlette en la cuarta etapa (primera llegada en alto). El macizo central con el inédito Mont Aigoual, que además será final de etapa. Y los Pirineos para el fin de semana, sábado 4 y domingo 5 de julio. Las dos con llegadas planas, pero en la primera después de encadenar Menté, Bales y Peyresourde, con final en Loudenville y solo 8 kilómetros de descenso desde la cima. Y al día siguiente una jornada por los Pirineos más cercanos a Navarra. Con el durísimo Col de Hourceres (más conocido como Issarbe), Soudet, Col de Ichere, Marie Blanque, que no hay cicloturista español que no conozca y final en Laruns.

Después del primer día de descanso, las tres etapas siguientes son más comedidas en montaña. Atraviesan Francia de oeste a centro. Desde Ile de Oleron, pegada al Atlántico, a Sarran. Tiempo para velocistas y para buscar escapadas. Porque en la etapa 13 vuelve la montaña con un recorrido pestoso por el parque natural de los volcanes de Auvernia y con final en el Pas de Peyrol, que tiene los últimos tres kilómetros al 12%. Jornada de transición al día siguiente hasta Lyon y la segunda semana acaba en los pre Alpes con un etapa, la 15, el domingo 12 de julio, con tres puertos duros, con kilómetros a más del 12% de media dos de ellos y final en La Gran Colombier, con 17 kilómetros de subida al 7,5%.

El día de descanso dará paso a tres etapas seguidas de alta montaña en los Alpes. La primera por la zona de Les Vercors. Tres puertos, Porte, Revel y Montee de Saint Nizier y final casi sin descenso y con un tramo llano de 10 kilómetros en Villard de Lans. Al día siguiente salida en Grenoble y dos puertos de idiosioncrasia alpina. Primero el habitual La Madeleine, con sus 17 kilómetros al 8,5% de media. Y después la subida a Meribel Col de la Loze, inédito en el Tour y con 21 kilómetros al 7,5%, eso sí, los últimos 4 siempre por encima del 10%. La tercera etapa consecutiva en los Alpes discurre por la zona del Mont Blanc, con cuatro puertos, Cormet de Roselend, Aravis, Saises, el sterrato de Plateau des Glieres y final en descenso en La Roche sur Fouron.

La antepenúltima etapa será para los sprinters antes de visitar Los Vosgos, la única cadena montañosa que faltaba en este Tour. Será la única contrarreloj de esta edición y en la penúltima etapa, la 20, el sábado 18 de julio. De inicio, 20 kilómetros planos, después otros 10 en ligera subida y los seis kilómetros finales de rampas durísimas de La Planche delle Belles Files. Desde allí saldrá vestido de amarillo el líder en París.

Etapa 8. Sábado 4 de julio

Etapa 9. Domingo 5 de julio

Etapa 13. Viernes 10 de julio


Etapa 16. Martes 14 de julio

Etapa 18. Jueves 16 de julio

Etapa 20. Sábado 18 de julio