Si alguien al que conoces desde hace una década y que ha rodado por los adoquines de Flandes, ha subido los puertos del Tour en Pirineos y ha completado las cicloturistas más duras de Europa te dice que ha cumplido su sueño ciclista supones que lo ha vivido se sale fuera de lo común. Eso mismo fue lo que me comentó Gerardo cuando descolgó el teléfono al acabar el Cycling Campus MTB by Škoda. Aunque sus redes sociales ya lo habían chivado día a día.
Él fue uno de la decena de afortunados en el sorteo We Love Cycling e incorporó a su hermano al pack, porque las invitaciones eran dobles. Le tocó sacar del armario la bici de MTB después de todo el verano ‘escondida’ y volver a la montaña después de años siendo un ‘carretero’. El ‘esfuerzo’ mereció la pena.
Así nos lo cuenta: “Jueves 23 de noviembre a las 10 de la mañana me suena el móvil. ‘Buenos días. Le llamo de Škoda y le informo que se apuntó a un concurso y le ha tocado un Campus’ (No me lo creía), ¿Quiere venir? Por supuesto, seguía sin creermelo”
Viernes. Rodando con Alberto Contador
La aventura de Gerardo comenzó a la semana siguiente. El viernes 1 de diciembre a las 04.30. Vive en Toledo y tocaba madrugar para desplazarse a Mar de Pulpí, el hotel de Almería donde se iba a hacer el Campus. Las primeras impresiones no pudieron ser mejores “Comienza el Campus Skoda organizado por Welovecycling. 9:55h llegada al destino y ya se divisan a lo lejos las banderas de Škoda y la flota de coches. Recepción, nos entregan las llaves del apartamento, mejor dicho mansión, y vaya recepción, igual como se ve en las fotos, nos llaman de la organización y nos dicen que vayamos a desayunar que todavía teníamos tiempo, que estaremos cansados del viaje. Así que a reponer fuerzas”.
Descanso, ordenar la maleta y comienzan las emociones fuertes. “A las 12:30h llega el mismísimo Alberto Contador y nos da la bienvenida. Así, con toda la naturalidad del mundo. No lo conocía y parece un buen tio fuera de la competición. Nos da una charla y al acabar abre turno de ruegos y preguntas. Allá que voy y me lanzo: ¿Alberto, tienes pensado ser director deportivo? Haber si quiere ficharme. Pero mala suerte, dice que no. Fotos con el mismo ganador de Tour, Giro y Vuelta. Y después a recoger el material ciclista de regalo… y qué material: Maillot y culotte de calidad, agenda, champús, toallas y bidón de reciclaje vidrio personalizado de #reciclavidrioypedalea”.
Y después de toca probar el menú del buffet del Hotel Mar de Pulpí… y el amigo Gerardito no puede contenerse con el despliegue de platos y postres del nutricionista Alex Lamata. Le toca compartir mesa con otro de los profes del Campus, Tomi Misser, que se integra en las conversaciones como uno más. Siesta, a vestirse de ciclistas Skoda… y ” a rodar unos kilómetros con Alberto Contador, un lujo total... Primera ruta por los caminos alrededor de huertos y frutales, y para finalizar la ruta, toca chocolate: descenso vertiginoso por una zona de barro, como mola, aquí el grupo de 30 se ha difuminado por todo el descenso, reagrupamiento y para Pulpí. Primera ruta acabada. Qué gozada rodar con Alberto Contador, Tomi Misser y Martínez Oliver.. A ducharse y a por la sesión de nutrición y musculatura que imparte Alex Lamata. Nos enseña las claves del “Plato Saludable. A las 21h cena con similar despliegue de manjares y ya vamos haciendo piña con ciclistas de Navarra, de Madrid, de Cáceres, Castellón Villarreal y demás zonas geográfia española. ”
Sábado. Descendiendo con Tomi Misser
El Campus tenía previsto más trabajo de bici al día siguiente. Así que pronto fuera de la cama para pedalear. “Lo primero, a levantarse, desayunar… Parece que no hay un mañana. Qué manera de devorar la gente el desayuno. Hay que coger fuerzas a tope. Antes de la salida me hago unas fotitos con Tomi Misser y llenamos bidones y víveres en el avituallamiento que tienen montado la fantástica familia de Welovecycling. Foto de familia, comenzamos la ruta y tras cinco kilómetros se divide el grupo en dos. Por un lado el grupo A con Tomi y por otro el grupo B con Martinez Oliver. Yo me voy al A junto a Tomi Misser y otra decena de ciclistas. Toca zonas técnicas, trialeras, subidas y bajadas vertiginosas. “Dónde te has metido Gerardito que tú no estás en forma”, pienso. Pero bueno, ahí anduvimos luchando y dando la talla. Eso sí en una 1h15′ y 18 kilómetros ya habíamos acumulado 600m desnivel por zonas técnicas. A partir de ahí empiezan los primeros consejos de Misser: “Cuando bajéis, bajad piñones,” y miramos piñoneras.. y nadie lo hace”.
El sábado por la tarde estaba reservado a algo más que bici. “No me lo esperaba, pero cuando me dijeron que había que probara varios coches Skoda se me encendieron los ojos. Como molan con su DSG. Voy cambiando con las levas en el volante, me lo paso de fábula, quedándome incluso en suspensión en 3 ruedas un minuto. Habrá que probarlos bien… Además me sirve para que los probadores me recomienden que coche comprarme”.
Y después de los coches, a seguir aprendiendo de ciclismo. “A las siete de la tarde nueva charla. Esta vez con Julián Sanz, un artista del Ultrafondo. Me siento junto a Martínez Oliver y me va comentando la jugada de su época, y lo compara con lo que nos están diciendo Julián, además nos habla de Copa de Ultrafondo que organiza en 2018 la RFEC. Fin de la exposición y tras varias preguntas, a la cena. Este viaje toca otro palet de platos, entre ellos risotto que estaba de vicio. Charla postcena con copa con la magnífica gente del campus y para el apartamento”.
Domingo. A fondo con Julián Sanz
El domingo era el último día de Campus y el jefe de ruta fue un tal Julián Sanz, el mayor especialista de Ultrafondo de España. “Desayuno, culotte, fotito rigor con la gente del staff técnico de Skoda, que nos hacen sentirnos como reyes y salida de la ruta… Hoy han decidido no hacer grupos (en mi opinión mejor, porque todos tienen derecho a estar con los profesionales, además para correr están las carreras, no los Campus). De salida subimos a un mirador para estirar piernas. Descenso y todos agrupados con coches de apoyo, ambulancias y demás como todos los días, rodeamos un acantilado con mucha piedra y pendientes grandes. Tras mucho observar le pregunto a Tomi porque casi siempre baja de pie no se sienta en las bajadas y me indica que así absorbe y se lanza más la bicicletita, y es verdad, pura verdad que lo probé. Después os meten por una zona de frutales donde entablo conversación con Julián Sanz sobre la Copa de España Ultrafondo. Veredas y trialeras, esta vez bajando, y regresamos al Hotel. Foto… y da pena saber que esto se acaba. Duchita y a comer, hoy toca en chiringuito a 5 metros del mar *que gozada* donde disfrutamos de diversa variedad de pescado recién capturados “esto es un auténtico lujo”.
Y para terminar el resumen de Gerardito deja bien clara su experiencia en el Campus. “Antes de comer nos pasan una encuesta sobre que nos ha parecido y yo lo tengo claro “ha sido una experiencia inolvidable para un gordito globero como yo que me han hecho sentirme como un auténtico profesional y no me ha faltado de nada, y ME HE DIVERTIDO desde el minuto cero. Tras la comida, nueva sorpresa. Nos regalan el maillot verde Santini de la Vuelta 2017 y la mascota del welovecycling, como mola… Tras esto, ya si que sí, esto se acaba pero han sido tres días inolvidables y que puedo definir en una palabra ESPECTACULAR“.
